En un mes, canceló un 35 por ciento de los pasajeros, la mayoría de otras provincias, por el efecto de la crisis.
Mariano Carmona, vicepresidente de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica de San Juan, aseguró que, según el relevamiento que hicieron en la última semana de diciembre, las reservas para los hospedajes céntricos generaron preocupación entre los empresarios de hoteles y, también, de restaurantes y bares, debido que era mucho más bajo de lo que esperaban. Desde el sector esperan una temporada y un año «muy complicado», dijo el dueño del restó La Madelein. Los que más sufren esta baja son los hoteles urbanos, los que, en enero, en general alcanzaban hasta un 65 por ciento de ocupación, a pesar de no ser el mes en el que más turistas reciben.
Para Carmona, uno de los problemas más graves es que deberán costear los gastos, aunque no tengan ocupadas las plazas dentro de los hoteles, ya que deben afrontar los sueldos de los trabajadores y los servicios, que además subirán por la inflación y los aumentos tarifarios que están pendientes. Si bien dijo que todavía trabajan para que no haya riesgo en los puestos de trabajo, «con un panorama tan incierto, cualquier consecuencia es esperable. Yo creo que el sector va a ser uno de los más golpeados por la crisis», aseguró. Entre las alternativas que analizan para que no suceda es «trabajar de manera integrada, porque es la única forma de que podamos mantener los niveles de actividad para cubrir los costos fijos».
En cuanto a las razones de la baja, para el empresario se trata de un escenario multicausal. «La recesión, el hecho de que no hay eventos como otros años en los que llegaba turismo de afuera y hasta el precio del combustible hicieron que caigan las reservas», aclaró. También a cambios en el turismo, que este año se comporta de forma más errática y, a último momento, hacen modificaciones en reservas o destinos. «Se está dando mucha demanda espontánea en otros destinos, personas que no iban a viajar finalmente lo hacen. La expectativa que tenemos es que también pase acá, que lleguen visitantes sin reservas», agregó.
Este mismo fenómeno es el que benefició a un sector muy puntual de cara a la crisis turística: los propietarios de cabañas y casas quinta de Rawson. En los últimos años, en este departamento crecieron los hospedajes para aquellos turistas que visitan la ciudad de San Juan, pero prefieren no hospedarse en el centro. Gastón Villordo, presidente de la Cámara de Comercio, Agroindustria y Turismo del departamento, aseguró que a los emprendedores del Médano de Oro se les cayeron un 30 por ciento las reservas en pocos días. La mayoría de los que llamaron para cancelar fueron turistas de otras provincias, que decidieron no viajar y tenían planeadas visitas de 10 o 15 días. El reemplazo de estos contratos es de sanjuaninos que no podrán irse a otros destinos y decidieron pasar uno o hasta tres días en estas cabañas para sus vacaciones.